Una entrevista a un fotógrafo ruso

«Transmito sentimientos

a través de mis fotografías»

Vladislav Gaus (Vlad Gaus), de 41 años, es un fotógrafo ruso afincado en Tarragona. Su ímpetu de artista le ha traído a la Costa Dorada, después de muchos viajes por Europa. 

Vlad tiene ascendencia alemana, por parte paterna. Nació y se crió en la república de Baskortostán (Bashkiria), de la ex Unión Soviética. Como fotógrafo artístico, siempre ha tenido inquietudes, y ello lo ha llevado a viajar mucho fuera de su país de origen. Le gusta la época a finales de primavera y el inicio del otoño. El verde es su color preferido. Le encanta la lectura, y conversa con agrado sobre las actualidades y los tiempos de la antigua URSS. Para él, lo más importante es transmitir sensaciones a través de la fotografía. Es un hombre culto y transparente, casado y con una hija. Su prioridad son las fotografías urbanas y de paisaje.

¿Cómo elegiste tu profesión?

Empecé con la fotografía hace veinticinco años, aunque intensamente me dedico a ello desde hace doce. Cuando apenas tenía siete años paseábamos mucho con mi padre, que se dedicaba a la fotografía. Entraba con él al cuarto oscuro para revelar las fotos que habíamos hecho. Él fotografiaba la naturaleza, también a mí y a mi hermana. Era ingeniero y hacíamos viajes juntos. Me gustaban los retratos que me hacía. Eran en blanco y negro. Fue hace tantos años...

No obstante, te atrae otro tipo de fotografía...

Mis temas preferidos son la arquitectura y los paisajes. Aunque la fotografía urbana es algo difícil, me gusta su orden. Para cada tipo de fotografía se necesitan distintas experiencias. Actualmente, me dedico a fotografiar interiores, edifiocios, la naturaleza y también, eventos privados.

¿Hay modas y tendencias en la fotografía moderna, que te gustaría destacar?

La  fotografía actual podría dividirse en fotografía de colores vivos y fotografía de colores no llamativos. Sin embargo, lo mas importante para mí es pensar en cómo hacer una fotografía de la mejor manera posible. En este sentido, hay que tener en cuenta la luz, y que el objeto sea interesante, también encontrar el punto ideal y que transmita tus sentimientos. El fotógrafo siempre está influenciado por lo que va a filmar. A diferencia de un pintor, creo que el fotógrafo trabaja de una manera distinta hablando de los mensajes artísticos y cómo se llega a estos.

Qué opinas sobre las diferencias entre la fotografía en color y la de blanco y negro?

En los últimos años, estamos demasiado mimados por la fotografía en color. No siempre es necesario “ver" el color sabiendo que este está allí. Recuerdo una vez cuando todavía era niño, en casa vimos un documental sobre un bosque, y yo exclamé que era verde. Sorprendidos mis padres, me dijeron que el color no se veía. Con este ejemplo quiero decir que la gente ha dejado de desarrollar su fantasía e imaginación.

El mundo va cambiando... Seguramente, es diferente del que tú empezaste a desarrollar tu carrera profesional. ¿Te pones límites en el trabajo?

Estoy haciendo muchas fotografías, por encargo también. A veces regalo fotos que he hecho, sobre todo, como recuerdo de las reuniones que hace un grupo de conocidos de origen ruso en la ciudad. No me pongo límites referente a la cantidad porque en eventos, sobre todo, se piden muchas fotos.

¿Por qué decidiste quedarte en Tarragona?

 Antes de elegir Tarragona, con mi familia visitamos Barcelona y otros lugares donde tenemos amigos. No queríamos una ciudad demasiado grande y ruidosa para vivir. Aquí nos gustó el clima y también la cocina catalana. Nos impresionó la gente porque cuando uno viene del extranjero percibe enseguida, que está en una sociedad buena y sana, y esto era fundamental para nosotros.

Foto: cedida